LA BANDERA DE LA PAZ

Las ideas no mueren, dormitan a ve
ces, pero al despertarse son aún más fuertes de lo que eran antes de su sueño». No ha muerto la Bandera de la Paz. Se ha ocultado, mientras se cometan atrocidades en la guerra. Pero llegará la hora, en que de nuevo se dirigirán conscientemente a la custodia de los valores culturales, a esta base verdadera del mundo. Y no solamente ondea la Bandera de la Paz sobre unos valores culturales. Ella ondea sobre el corazón humano, sobre aquel gran tesoro, donde esta creado el futuro renovado. El corazón humano ansía la paz, y, puede ser, que este mundo ya se acerca.

Estudien la literatura sobre la Bandera de la Paz, sobre el tratado de la defensa de los tesoros culturales. No es breve esta literatura - más de trescientos libros, folletos y artículos en diferentes lenguas. Y cuántas menciones en otros libros, en ensayos y en conferencias. Cuántos pensamientos generosos, inolvidables son expresados en estas llamadas y afirmaciones. Miro la foto de nuestras conferencias en Brujas y Washington, y veo que tales reuniones no pasaron sin dejar huella. La "Oriflamma" se ha extendido por todo el mundo. En las bibliotecas están guardadas las semillas de aquellos acontecimientos. Esta noticia será pronto necesaria. Los pueblos se acordarán de los trabajos anteriores y los completarán por sus sólidos resultados. ¡Las ideas viven! ¡Volverá la Bandera de la Paz!...   


Nicholas Roerich 1944